Ante la ansiedad ¡RESPIRA!
La ansiedad también es conocida como miedo o nerviosismo, se puede presentar como una sensación de angustia o inquietud provocada por la presencia de un peligro real o imaginario, puede presentarse como un sentimiento de desconfianza que impulsa a creer que ocurrirá un hecho contrario a lo que se desea.
La ansiedad es una reacción normal al estrés. La vivimos todos los días de diferentes formas y hasta cierto punto en diferentes cantidades. Un ejemplo común es la ansiedad que se origina por un choque en la calle que podría evitar llegar a un evento importante como puede ser llegar puntual a tu trabajo porque en caso de no llegar puntual podría haber un castigo o sanción por llegar tarde.
En los jóvenes que estudian, sienten
ansiedad antes de tomar un examen. Es está ansiedad la que nos ayuda a
enfrentar ciertas problemáticas diarias ayudándonos a concentrarse y prepararse
para el examen de igual manera para aquella persona que necesita llegar a
tiempo a un evento, esta ansiedad le ayudará a concentrase para resolver una problemática
e incluso para organizarse previamente verificando los tiempos estimados para
llegar a tiempo a su evento.
La problemática real es para aquellas personas con trastornos de ansiedad, el miedo o el nerviosismo no es temporal está sensación de angustia no termina, no es encausada a un desahogo y puede desencadenar problemas mayores que afectan la vida cotidiana.
¿Qué puedo hacer si tengo ansiedad?
RESPIRA
Las técnicas de relajación y respiración son
muy útiles para controlar la ansiedad que generan algunas situaciones.
En el momento
que presentamos ansiedad, nuestro organismo se encuentra en alerta, es decir
que se prepara para reaccionar, en ese momento podemos hiperventilar, o hacer
respiraciones muy profundas. En estos momentos podemos respirar más ó menos
oxigeno del que sí necesitamos es en este momento que nos llenamos de
sensaciones desagradables como mareo, sensación de ahogo, cansancio o sensación
de desmayarse, visión borrosa, palpitaciones aceleradas, hormigueo en
extremidades.
la respiración profunda o diafragmática
Con ésta técnica se maximizar la
capacidad pulmonar y favorece la oxigenación sanguínea.
Consiste en una inspiración profunda,
seguida de un período de retención del oxígeno aproximadamente de 3 a 5
segundos posteriormente una lenta exhalación del aire.
Para hacer correctamente la
respiración, es importante tener una postura adecuada, ya sea sentados o de pie
se debe tener la espalda recta de manera cómoda con los hombros en su lugar y
los brazos relajados con una mano sobre el pecho y la otra mano sobre la zona
del abdomen, ambos pies deben estar apoyados en el suelo.
Éste tipo de respiración profunda puede disminuir las sensaciones desagradables
que siente y tranquilizarlo para pensar más claramente y actuar ante una situación.
Es muy importante enseñar este tipo
de respiración a los niños y jóvenes que cuentan con mucha energía o que se
sienten tristes o preocupados ante una situación.
Tip: La aromaterapia
puede ayudarte a reducir la ansiedad, el miedo o el nerviosismo que sientes.
Te recomendamos usar aceites esenciales
puros y de grado terapéutico con la ayuda de un difusor.
Los aceites esenciales que puedes usar
son: Lavanda, Naranja, Mandarina,
Violetas, Geranio, Bergamota, Jazmín, Ylang-ylang.
Si necesitas ayuda en los procesos que te causan ansiedad, miedo o
nerviosismo puedes contactar conmigo al WhatsApp: 33 32 25 09 09 ó al correo: psicologaperlacabrera@gmail.com
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